Los domingos parecen ser los días más complicados para el control ACC de Ezeiza, dada la cantidad de vuelos privados que ingresan en la CTR de SAEZ.
Alrededor de las 13 horas del día 3 de junio, registramos un Helicóptero Robinson R44 color Negro mientras cruzaba umbral de pista 29 a unos 600 pies de altitud en dirección Sur. Casi de inmediato la operadora de la torre de Control de Ezeiza intentó contactarlo en dos oportunidades pero no hubo colación por parte de la aeronave.
Cinco días más tarde, se repite el mismo evento con otro R44 de color verde casi con una idéntica trayectoria y en las mismas circunstancias ignorando los reiterados llamados de la Torre de Control de Ezeiza.
Cinco días más tarde, se repite el mismo evento con otro R44 de color verde casi con una idéntica trayectoria y en las mismas circunstancias ignorando los reiterados llamados de la Torre de Control de Ezeiza.
El 22 de noviembre de 2014 ocurrió un episodio mucho más grave cuando otro Robinson R44 cruza por el mismo sector con rumbo Norte, mientras un Boeing 777 de la empresa Emirates se encontraba a cinco millas en final de la pista 29.
Son innumerables la cantidad de este tipo de eventos que se suceden en el espacio aéreo argentino, y casi por obra divina no derivan en circunstancias en las que se deban lamentar vidas.
Lo cierto es que las autoridades competentes deben tomar cartas en el tema interviniendo de manera activa con medidas contundentes para que éstos hechos no queden relegados a informes que, luego de un tiempo corto, son archivados.
